Primer certamen de jóvenes críticos en el Festival Internacional de Buenos Aires
miércoles, 7 de octubre de 2009
Stravinsky revisitado
La compañía dirigida por el coreógrafo y bailarín finlandés Tero Saarinen dio por comenzada la temporada internacional del VII Festival de Buenos Aires, presentando Velada con Stravinsky, espectáculo en el cual se desarrollan dos importantes piezas del consagrado compositor ruso junto a un trabajo propio del grupo.
Una entretenida puesta de Petruskha –originalmente estrenada en 1911-, donde se destacan dos acordeonistas que ejecutan la pieza musical en vivo, recorre de un modo tradicional la historia que es representada únicamente por sus tres principales personajes: una bailarina, Petruskha y el Moro, retratan las posibilidades y pérdidas del amor. Petrushka es la historia de una marioneta que cobra vida y revela sus sentimientos, tanto de amor como de furia cuando ella no le corresponde.
De este modo comienza el espectáculo, con una puesta sencilla donde lo tradicional y lo clásico se observa tanto en el vestuario como en la iluminación. En cuanto al diseño lumínico, se destaca otro espacio delimitado en el escenario por bombillas de luces donde a modo de espacio circense, los bailarines interpretan.
Sin embargo lo innovador de lo coreográfico en la danza se encuentra superado por el modo en que se interpretó musicalmente la obra: un Stravinsky hecho por dos acordeones.
La segunda pieza, llamada Hunt, con música de La consagración de la primavera, es protagonizada únicamente por el nombrado Tero Saarinen que trabaja junto un novedoso trabajo de multimedia elaborado por Marita Liulia. La proyección ya no es trabajada sobre un fondo, sino que se utiliza el mismo cuerpo del bailarín y su vestuario diseñado por Erika Turunen como pantalla.
Una propuesta desde innovadora tanto en el recurso de multimedia, como en el modo en que se decide abandonar el argumento tradicional de Stravinsky.
Una fiesta musical donde los limites de lo clásico se empiezan a cuestionar.
Por Franco Candiloro